lunes, 15 de octubre de 2012


Por aquí somos muy de poner puertas a todo. Al watercloset, al dormitorio, a los armarios y, según dicen algunos, al campo. Laura Felip decidió crear un armario abierto para guardar las cosas de su hijo, prescindiendo de puertas y aprovechando de paso un estantería IVAR. Laura nos lo cuenta así.

Producto utilizado: IVAR

Con la llegada de nuestro primer hijo, tuvimos que pensar en montar su habitación en el espacio que siempre había sido el cuarto de estudio. Quitamos algunos muebles y añadimos la cuna, una cómoda y un sillón.

Había una estantería modulable IVAR donde almacenábamos libros que en su día nos había pasado la hermana de mi pareja, con la que no sabíamos exactamente qué hacer y tampoco nos apetecía deshacernos de ella.

Entonces, pensando en las necesidades del bebé, se me ocurrió transformarla en un armario abierto para sus cosas y la ropita. La pintamos y le añadí una barra para poder colgar las perchas, así como unos cestos para las cosas más pequeñas: calcetines, ropa interior, etc.

Os puedo decir que es una de la parte del mobiliario que menos tiempo y money nos costó y sin embargo ¡la que más nos gustaba de la habitación de Martí!

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