Los estantes no solo pueden contener libros y libros, también son muy apañados cuando se trata de fabricar una pequeña repisa que de servicio a espacios estrechos. Ana lo sabe y nos presenta su trabajo:
"Mi recibidor de casa es pequeñísimo, un minipasillo y necesitaba algo para poner las llaves, así como los paraguas y un espejo para el último retoque de la mañana. Todas las consolas de recibidor que veía (aparte de caras) eran o muy largas o demasiado anchas, así que me quitaban espacio para pasar a la casa o me tapaban el acceso a la cocina.
Ya estaba desesperada cuando se me ocurrió poner una balda estrecha Ekby Viktor con unos soportes Ekby Mans. Añadí el espejo Kolja y unas pegatinas de plantitas verdes, para que continuara con los colores de mi salón (blanco, verde y rojo) . Una maceta roja de arcilla hace de paragüero".