Las zapatillas pueden resultar muy decorativas, no es de extrañar que Ismael y Alicia quisieran tener un zapatero en el cual exponerlas. La solución, bajo estas líneas:
Necesitábamos un zapatero, pero no nos gustaba ninguno, ya que queríamos que los zapatos estuviesen a la vista. Lo solucionamos fabricando uno a base de estanterías LACK pequeñas, blancas y negras, un poco de dibujo técnico para sacar los ángulos y que quedara más o menos equilibrada, y el taladro para hacer los agujeros en la pared.
Así, en un espacio bastante reducido tenemos nuestro propio zapatero para dieciséis pares de zapatos.