Mesa y cama están muy unidas, qué mejor que una siestecita después de una buena comida...
Pero en el caso que nos ocupa, este Hack realizado por Yolanda, es la propia mesa la que ha acabado en la cama, convertida en cabecero. Se trata de las mesitas LACK, uno de los productos más baratos que se pueden encontrar en Ikea.
Así nos lo cuenta Yolanda:
"No tenia presupuesto y necesitaba un cabecero para la cama barato y fácil de hacer.
Con cuatro mesas LACK pequeñas de 55 x 55 cm unidas con escuadras me salio uno de 220 cm. Los colgué de la pared con los mismos tornillos que suministra Ikea para unir las patas con la mesa.
Y todo por 19,80 euros.
También añadí mesitas, lámparas y funda nórdica; todo, todo Ikea".