sábado, 23 de agosto de 2008


Hace un tiempo hubo hubo en Ikea una llamativa cama redonda, que se podía separar en cuatro partes.

Quizá cansada de verla todos los días ahí, tan redonda ella, como invitando a excitantes experiencias que nunca llegaron, Queen esotérica decidió darle la vuelta, convirtiéndola en un curioso sofá.


Las dos mitades se separan mediante un módulo de madera que hace las veces de estantería y reposabrazos, creando una singular zona de descanso en la sala de estar.
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...